• Tendrá que desprenderse de los intereses de TRW Automotive en el frente de las suspensiones tanto en Norteamérica como en Europa
TRW Automotive tendrá que desprenderse de sus intereses en el campo los tirantes y suspensiones |
MADRID ─ La Comisión Federal de Comercio de EEUU (FTC) ha autorizado la compra de la norteamericana TRW Automotive por la alemana ZF Friedrichshafen, de la que nacerá el segundo proveedor mundial de equipos y componentes para el automóvil, por detrás de Bosch. Pero la FTC exige a ZF que se desprenda de los intereses de TRW Automotive en el campo de los tirantes y las suspensiones tanto en Norteamérica como en Europa. Ahora, conseguida la luz verde condicional de la FTC, la compra, anunciada a finales de agosto de 2014 y que costará a ZF 12.400 millones de dólares (unos 11.000 millones de euros al cambio actual), sólo tiene que logar el beneplácito de las autoridades antimonopolio mejicanas, por lo que se espera que pueda cerrarse por completo a finales de este mismo mes.
ZF y TRW son dos de las tres compañías que fabrican en Norteamérica tirantes y suspensiones para los vehículos de motor. En total, se dedican a esa producción cinco plantas fabriles en EEUU, Canadá, República Checa y Alemania, amén de un espacio alquilado en un laboratorio de este último país.
Como ya comentamos oportunamente en esta web-blog, en marzo último la Comisión Europea también autorizó la compra, imponiendo asimismo condiciones, por cierto muy similares a las ahora establecidas por la FTC de EEUU. Las exigencias de Bruselas consistían en que TRW automotive se desprendiera de todos sus intereses y actividades (contratos de suministro, diseño, fabricación y venta) de componentes para chasis de coches y vehículos industriales en Europa.
Algunos expertos creen que el interés del proveedor alemán por hacerse con su rival reside en el deseo de posicionarse tecnológicamente para obtener el máximo provecho de un supuesto aumento de las ventas de coches autopilotados en las décadas próximas.