- El grupo sueco eleva un 53,8% su objetivo de reducir costes, poniéndolo en casi 1.100 millones de euros, al tiempo que recorta su cúpula ejecutiva dejándola en 10 cargos, frente a los 16 que tenía
Olof Persson, presidente ejecutivo del grupo sueco VOLVO |
Entre las medidas que se acaban de anunciar figura, por ejemplo, que la cúpula gestora del grupo pasará a estar formada por 10 gerentes, 6 menos que en la actualidad, y los tres grupos regionales de ventas con que ahora cuenta se integrarán en una sola organización. Además, aparte del recorte de 4.400 puestos de trabajo que contemplaba el objetivo inicial de reducción de costes, el grupo sueco va a revisar ahora sus actividades en el campo de la Tecnología de la Información (TI, servicios informáticos) que da empleo a miles de personas, para ver cuántas de ellas son realmente necesarias.
De hecho, esa revisión podría conducir a una desinversión completa de los intereses de Volvo en el ámbito de la TI, algo sobre lo que corren rumores desde hace ya tiempo. Incluso si se produjera esa desinversión, el recorte de personal acumulado con los 4.400 puestos de trabajo eliminados previamente sería una cantidad pequeña en proporción a los 110.000 trabajadores que ahora tiene la plantilla del grupo sueco, el mayor generador sueco de empleo.
Como el área de TI ha pasado a depender del director financiero y el responsable de Volvo CE, la división de maquinaria para obras, dejará de formar parte de la cúpula directiva, para reportar al responsable de su correspondiente área de negocios, y Persson también ha anunciado que va a meter la tijera en los costes de su división Volvo CE, algunos analistas han llegado a plantearse también una posible desinversión de los intereses del grupo sueco en este último frente, algo que cuesta bastante admitir por las sinergias que esta división aporta al grupo al usar los mismos motores que los camiones y autobuses, aunque es cierto que los efectos de la crisis en las inversiones en ingeniería civil y construcción privada han afectado negativamente a los resultados de Volvo CE, al tiempo que mermado los efectos positivos de tales sinergias. Desde luego, tal desinversión supondría un cambio radical de táctica por parte del grupo sueco, que lleva años impulsando su división de maquinaria para obras a través de diversas adquisiciones de compañías rivales.
Por el momento, la demanda de maquinaria para la construcción crece en Norteamérica pero acelera su caída en China. En Europa, el tirón de la economía británica y la aún apreciable fortaleza de las de Alemania y Francia, habían hecho crecer en un 10 por ciento la demanda de la maquinaria de obras, pero la evolución a la baja de la economía rusa y la de alguna de las de los países antes mencionados, han desencadenado una sensible contracción de aquella demanda en meses recientes.
Los ingresos crecieron un 4 por ciento en el trimestre
Volviendo a los resultados financieros del tercer trimestre de 2014, los beneficios operativos de Volvo fueron de 2.900 millones de coronas suecas, un 16 por ciento más que en el mismo trimestre de 2013. Ahora bien, descontando las cargas derivadas del actual proceso de reducción de costes, que ascendieron en el trimestre a 659 millones de coronas, el margen operativo baja del 4,3 al 3,3 por ciento. Los ingresos totales del grupo fueron de 67.200 millones de coronas en este tercer trimestre, un 4 por ciento más que en el mismo trimestre de 2013. Los ingresos netos ascendieron un 9 por ciento, alcanzando 1.600 millones de coronas en el tercer trimestre de 2014.
Persson repasó la situación actual advirtiendo sobre los efectos negativos que pueden derivar de la incertidumbre en que vive la demanda europea de vehículos industriales, debido en parte al debilitamiento de algunas de las economías que tradicionalmente han sido el motor del desarrollo de Europa occidental y, también en parte por la crisis Rusia-Ucrania, pese a las garantías que todos los días se dan desde uno y otro lado en el sentido de que la aquélla no va a agravarse. En Norteamérica, sin embargo, está claro que las ventas de camiones han aumentado el rimo. Para 2015, la previsión de Volvo es que las ventas seguirán al mismo nivel que en el presente año tanto en Europa como en China y Japón, en tanto que crecerán en Norteamérica e India y bajarán en Brasil.
La entrada de pedidos de las gamas media y pesada de Renault Trucks cayó un 22 por ciento en el tercer trimestre de 2014 |
Fuerte caída de los pedidos de Renault Trucks
Sin embargo, el descenso de pedidos europeos de Renault Trucks se agrava ya que si en el conjunto de los nueve primeros meses es en 2014 un 7 por ciento, en el de del tercer trimestre de ambos años refleja una bajada del 11 por ciento.
El lector tendrá una perspectiva complementaria de la evolución de los pedidos del fabricante francés hoy encuadrado en el grupo sueco si sabe que, en tanto que en el tercer trimestre de 2014 crecía en Europa la demanda de la gama ligera de Renault Trucks, la entrada de pedidos de las gamas media y pesada caía nada menos que un 22 por ciento en el Viejo Continente.
Persson achaca la marcha negativa de la cartera de pedidos de Renault Trucks a la contracción de la demanda de camiones en Francia y a la renovación de la gama de la marca francesa. En este punto, pensamos que el grupo sueco debería hacer un examen de conciencia y analizar si realmente ha gestionado ese cambio de gama en la forma más correcta o, por el contrario, un deseo a ultranza de mantener la hegemonía del producto propio y un pasar por alto el efecto que el fenómeno Euro 6 iba a tener en el mercado, aumentando la demanda de camiones Euro 5 en los últimos meses de 2013 a costa de las ventas que normalmente se habrían producido en 2014, no le está pasando ahora al grupo Volvo una factura no deseada tanto en el plano de las ventas como de la acumulación de stock. Precisamente esto último forzará en semanas próximas a cerrar durante unos días algunas de las fábricas de Renault Trucks para no seguir acumulando existencias.