🔸 Tiene capacidad para 8 viajeros sentados y 6 de pie y una conducción autónoma de nivel 4, según la escala definida por la Sociedad de Ingenieros de Automoción (SAE) de Estados Unidos
Cadena de montaje de los microbuses autónomos Apollo en las instalaciones de King Long en China |
Para quienes no estén muy familiarizados con los cinco niveles definidos por la Society of Automotive Enginers (Sociedad de Ingenieros de Automoción, SAE) para la conducción autónoma, a continuación se detallan las características más importantes del mencionado nivel 4:
El ocupante u ocupantes del vehículo no tienen que intervenir para nada durante el desplazamiento del mismo; la conducción autónoma sólo funcionará en determinadas condiciones y no entrará en acción hasta que no se den todas esas condiciones; el vehículo no tendrá que tener volante, dirección y pedales obligatoriamente.
En 2017, King Long y el gigante tecnológico Baidu se aliaron para acometer el desarrollo de un autobús con conducción autónoma sin conductor, dotándolo de inteligencia artificial para pensar por sí mismo ante cualquier tipo de adversidad. El proyecto fue bautizado con el nombre Apollo.
Tras múltiples ensayos reales llevados a cabo desde entonces en varias ciudades asiáticas, así como en el servicio de pasajeros del Aeropuerto Internacional de Guangzhou y en la Nueva Área de Xiongan, cada uno de los modelos fabricados inicialmente han recorrido una media de 10.000 kilómetros.
Un microbús de 14 plazas
El fruto resultante de todo ese trabajo ha sido un microbús que ha recibido el nombre Apollo, el mismo nombre del proyecto y, en principio, tiene capacidad para 8 viajeros sentados y 6 de pie, con una carrocería de 4.330 milímetros de longitud, pudiendo trabajar en todo tipo de condiciones climatológicas.
El Apollo va dotado de un sistema multisensor de 4 capas con cámaras de 360º para evitar ángulos muertos y que garantiza una precisión del 99,99 por ciento en el posicionamiento del vehículo, así como la capacidad y control inteligente para bordear, adelantar o frenar ante cualquier tipo de obstáculos, conducir directamente hasta la próxima parada y entrar o salir de plazas de aparcamiento.
El motor eléctrico que impulsa al Apollo tiene una potencia de 110 kilovatios (147 caballos) que permite una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora con una pendiente máxima superable del 14 por ciento.
Las baterías del Apollo ofrecen una autonomía de 130 kilómetros tienen dos modalidades de carga: rápida (2 horas) y lenta (10 horas).
Y, a continuación, el vídeo prometido, que muestra el comportamiento del microbús Apollo de King Long mientras se desplaza sin conductor.