• Supuestamente usaban un software ilegal en los motores de 2 litros que detectaba cuándo se estaban controlando las emisiones de éstos para reducirlas al mínimo
El VW Jetta 2.0 TDI fue elegido Coche Verde del Año por Green Car Journal en el Salón de Los Angeles de 2008 |
Los modelos que pueden llevar montado ese software son los Volkswagen Jetta (2009-2015), Volkswagen Beetle (2009-2015). Audi A3 (2009-2015), Volkswagen Golf (2009-2015), y Volkswagen Passat (2014-2015). Se da la circunstancia de que uno de esos modelos, concretamente el Volkswagen Jetta TDI, fue nombrado coche verde del año en noviembre de 2008 por la publicación Green Car Journal y en el marco del Salón del Automóvil de Los Angeles, lo que no deja de ser un sarcasmo cuando ahora la EPA asegura que, en circulación normal y sin la configuración de emisiones mínimas activada en el motor de esos vehículos, las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) pueden alcanzar niveles 40 veces superiores a los permitidos legalmente.
La EPA y el Consejo Californiano para los Recursos del Aire (CARB en su acrónimo inglés) iniciaron las investigaciones a raíz de que un análisis independiente pusiera en evidencia irregularidades en los niveles de emisiones contaminantes de los vehículos. En el presente mes, la EPA y el CARB pidieron explicaciones a Volkswagen y Audi sobre el asunto y las marcas reconocieron que algunos de sus modelos llevaban dispositivos de desactivación controlados por software. Ambas organizaciones han manifestado sentirse muy defraudadas por el comportamiento de las dos marcas alemanas.
Un portavoz de la EPA ha expresado su deseo de que Volkswagen y Audi hagan una revisión voluntaria de los vehículos que montan esos dispositivos de desactivación para eliminar éstos y hacer que dichos vehículos cumplan la normativa sobre control de emisiones contaminantes en todo momento, no sólo en las comprobaciones de laboratorio.
Charles C. Foti, antiguo fiscal general de Louisiana y hoy socio del gabinete de abogados Kahn Swick & Foti (KSF), ha iniciado una investigación contra Volkswagen y Audi por posible fraude al consumidor y publicidad engañosa, haciendo al tiempo un llamamiento público para que todos aquellos ciudadanos estadounidenses que hayan comprado uno de los modelos mencionados en párrafos anteriores o tengan información que consideren que puede ser útil en la investigación abierta por KSF se pongan en contacto con este gabinete de abogados.