🔸 La demanda de estos vehículos caerá un 14 por ciento en 2022 y un 10 por ciento adicional en 2023 y no igualará el nivel de 2007 hasta después de 2026
MADRID ─ El año 2022 cerrará con un descenso del 14 por ciento en la demanda de remolques y semirremolques pesados en Europa del Este, caída que continuará en 2023 con una nueva contracción, aunque esta vez de solo el 10 por ciento, debido a la continuación de la guerra en Ucrania, la crisis energética, la inflación y, por supuesto, la falta de confianza empresarial que retrasará la inversión en equipo de transporte. Ese es el pesimista pronóstico de un informe que acaba de publicar CLEAR International, una consultora británica que sigue muy de cerca la evolución de las ventas de remolques y semirremolques en el Viejo Continente, sobre la evolución de ese mercado hasta 2026.
Al presentar dicho informe, Gary Beecroft, director gerente de CLEAR, señaló que tras la fuerte caída de las ventas de tales vehículos que se produjo en la región mencionada durante 2020 a consecuencia del COVID-19, se registró en 2021 un aumento del 42 por ciento en las matriculaciones de remolques y semirremolques pesados en dicha región, un incremento debido principalmente al tirón de las ventas que registraron los mercados de Polonia y Turquía. En realidad, todos los países de la región experimentaron subidas, aunque con notables diferencias entre unos otros; en términos porcentuales, el crecimiento en 2021 osciló entre el 6 por ciento registrado en Rusia y el 112 por ciento de Lituania, matizó Beecroft.
Sin embargo, las perspectivas a corto plazo son todo menos positivas, advierte Beecroft, que añade que aunque el nivel de demanda de estos vehículos en Europa del Este superará con cierto margen el pronóstico para 2022 que se hacía en nuestro anterior informe de marzo del presente año, debido casi en su totalidad a una reactivación de la demanda en el mercado turco, el pronóstico para el período 2023-2026 se ha degradado para todos esos años, en particular por lo que concierne al mercado ruso.
Según este nuevo informe de CLEAR, Rusia, que hasta 2010 había sido el mayor mercado de remolques y semirremolques pesados de Europa del Este, sufrió una caída del 50 por ciento en la demanda de estos vehículos entre 2011 y 2015, pero tuvo una recuperación asombrosa en 2017/18, volviendo a ser el mayor mercado en 2019-20. La demanda turca alcanzó un nuevo mínimo en 2019, pero la recuperación ya está en marcha, aunque permanecerá en el segundo lugar detrás de Polonia hasta el final del período de pronóstico, indica Beecroft.
El informe que acaba de publicar CLEAR se señala que mientras que la demanda de transporte por carretera (medida en toneladas-km) en Europa Occidental aún no ha recuperado los niveles que eran típicos antes de la recesión de 2009, en Europa del Este la demanda de transporte por carretera tanto nacional como internacional ha seguido creciendo cada año desde el año 2000 hasta 2018, año en que ese crecimiento se estancó debido a la las desaceleraciones de las ventas en Bulgaria, Chequia, Estonia, Polonia y Hungría. Es cierto que en 2019 se produjo un crecimiento del 5,6 por ciento en la demanda pero esto se debió principalmente a la actividad internacional en Polonia y Lituania. Ese crecimiento continuó en 2020 y 2021 con un 3,2 y un 7,7 por ciento, respectivamente.