🔸 El constructor sueco anuncia que recurrirá la sanción ante el Tribunal de Justicia, el máximo tribunal de la Unión Europea
MADRID ─ El Tribunal General de la Unión Europea (UE) en Luxemburgo ha confirmado la decisión de la Comisión Europea (CE) de 2017 en la que este organismo multaba a Scania, el fabricante sueco de vehículos industriales hoy integrado en el grupo alemán Traton, con 880 millones de euros por confabularse durante 14 años (desde 1997 a 2011) con otros cinco fabricantes de camiones sobre los precios de los camiones y sobre cómo transferir a sus clientes los costes de las nuevas tecnologías para cumplir con futuras normas sobre control de emisiones contaminantes más estrictas.
La sanción es la segunda más alta de la UE para una empresa en un caso de fijación de precios, superada solo por la sanción de 1.000 millones de euros que la CE impuso a Daimler AG por participar en el mismo cartel. La sentencia puede ser recurrida ante el Tribunal de Justicia, el máximo tribunal de la UE, cosa que un portavoz de Scania ya ha dicho que hará su compañía, insistiendo en que Scania dijo el miércoles que impugnaría la decisión de la Comisión en los tribunales.su compañía no había participado en acuerdo alguno sobre la fijación de precios con otros fabricantes, ni había retrasado la introducción de nuevos motores más eficientes.
La Comisión Europea multó a DAF, Daimler, DAF, Iveco, MAN y Volvo/Renault Trucks con un total de 2.930 millones de euros en 2016 después de que estos fabricantes admitieran su participación en el cártel y llegaran a un acuerdo con las autoridades comunitarias. MAN fue exonerada de sanción por haber sido la compañía que puso los hechos en conocimiento de las autoridades comunitarias.
Scania, que inicialmente estaba dispuesta a participar en las negociaciones para alcanzar algún tipo de conciliación, abandonó posteriormente este camino, llevando su caso al Tribunal de la UE.
Scania argumentaba que la CE había vulnerado el principio de presunción de inocencia y su derecho a defenderse, al no haberse establecido que sus comunicaciones con los rivales infringieran la normativa comunitaria y, sin embargo, haberse fijado una multa que era excesiva.
Si finalmente se confirma la sanción de 880 millones de euros para Scania, al sumarla con los 2.930 millones con que en conjunto fueron sancionados el resto de los fabricantes de camiones que participaron en el denominado Cártel de los Camiones, nos encontraríamos ante una sanción total de 3.810 millones de euros que se convertiría en la mayor impuesta por la CE en un caso de actividades monopolísticas.
Las actividades del Cártel de los camiones afectaron a 10 millones de camiones en toda Europa y se estima que 200.000 de ellos en España.