miércoles, 4 de marzo de 2015

¿UN CERTIFICADO OBLIGATORIO DE REPARACIÓN DE LOS DEFECTOS ENCONTRADOS EN LA ITV?

En Mallorca ya lo han instituido con carácter voluntario en el marco de la lucha contra los talleres ilegales Supondría una nueva traba para la consecución de las ayudas de futuros PIVE



MADRID ─ Los medios de comunicación de las Islas Baleares han difundido la noticia de que este lunes último se presentó en Mallorca el certificado de reparación que a partir de ahora solicitarán las ITV mallorquinas a los propietarios de los vehículos que acudan a una segunda inspección por haber sido rechazados en una primera al haberse encontrado en los vehículos defectos graves o muy graves. El certificado será emitido por los talleres autorizados legalmente que sólo tendrán que descargar por Internet un documento de la página web de la Dirección General de Industria y Energía. Será un documento gratuito y voluntario, por ahora y aunque en principio parece orientado a la lucha contra los talleres ilegales que, según parece, son un 30 por ciento de los que actualmente funcionan en esa provincia, su generalización y obligatoriedad podría tener algún efecto colateral muy interesante.
Comenzaremos por subrayar que ese certificado había sido solicitado hace tiempo por la Federación Española de Empresarios Profesionales de la Automoción (CONEPA), siéndole denegado por el Ministerio de Industria. Ahora, una dependencia de este mismo Ministerio autoriza a la Asociación Empresarial de Automoción y Náutica de Baleares (ASEMA), integrada en CONEPA, que pueda solicitarlo, no exigirlo, porque, como se dijo antes, el documento tiene carácter voluntario. Y, además, en la presentación del certificado participaba el director general de Industria, Jaime Ochogavía. ¡Toma ya coherencia y coordinación!.

Ahora, el peligro es que si un automovilista acude a la segunda inspección de su vehículo con el certificado en cuestión, el personal de la ITV rebaje, aunque no sea más que instintivamente, sus niveles de exigencia al comprobar que los defectos graves o muy graves señalados en la primera inspección han sido debidamente subsanados.

Si el certificado empieza a generalizarse y su uso se hace obligatorio, cuesta mucho creer que las administraciones central,regionales o municipales vayan a resistirse a la tentación de asociar la emisión del documento a una nueva tasa.

Además, y como ya advertíamos en un comentario muy reciente en esta misma web-blog, si el certificado se generaliza y se convierte en obligatorio y los futuros planes PIVE ─si es que los hay─ siguen manteniendo la exigencia de la ITV en regla que se ha incorporado hace sólo unos días en el PIVE 7, mucho nos tememos que se van a reducir apreciablemente los automovilistas que opten a las ayudas de esos futuros planes, pues el coste de la reparación de sus vehículos de más de 10 años para superar la segunda inspección puede ser mucho mayor que la cuantía de la ayuda.

Según anunciaba recientemente Luis Rivas, secretario general de AECA-ITV, la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Tecnica de Vehículos, sólo en la Comunidad de Madrid el porcentaje de rechazo por fallos graves o muy graves de vehículos de 10 a 15 años ronda el 20 por ciento.