🔸 Se prevé que el sector recupere la mitad del nivel prepandemia al terminar el año y que vuelva a aquellas cifras en 2022
MADRID ─ La desaparición de los límites de movilidad impuestos por las autoridades a raíz de la aparición del COVID-19 ha permitido a los talleres españoles de automóviles cerrar la campaña estival con un 4,3 por ciento más de reparaciones, según Solera, una compañía que analiza anualmente más de cuatro millones de reparaciones gestionadas por sus más de 235.000 clientes y socios en más de 90 países de los seis continentes. De este modo, el sector avanza en su recuperación, que al concluir 2021 debería situarse a medio camino de lo que fue en 2019 y recuperar por completo el nivel de entonces en 2022. En concreto, las previsiones de Solera estiman un crecimiento de más del 11 por ciento en 2021, lo que dejaría la cifra a casi nueve puntos porcentuales del volumen de actividad previo a la pandemia.
Para entonces, cuando sea un hecho la recuperación, los talleres se encontrarán con un mayor envejecimiento del parque. Si en 2015 los coches de más de 10 años de edad representaban el 53 por ciento del total en circulación, ahora son el 62 por ciento. Sin embargo, a pesar de ser una gran mayoría y disparar por encima de los 13 años la antigüedad ─a más “canas”, menos taller─ pues apenas representan el 25 por ciento de las reparaciones.
Todo ello representará un reto para la llamada clase media del taller, es decir, aquellos negocios medianos que fueron los que más crecieron en número durante la recuperación, pasando del 40 por ciento en 2017 al 45 por ciento en 2020.
Desde MOTORSCOPIO queremos advertir al lector que debe tener mucho cuidado a la hora de sacar conclusiones de datos porcentuales como los que se manejan en los dos párrafos precedentes, puesto que, por poner un ejemplo, el aumento del 53 al 62 por ciento en los vehículos de más de 10 años de edad registrado desde 2015 puede deberse en gran medida al hecho de que, como en realidad ha ocurrido, en ese período, sobre todo en su segunda mitad, se han reducido notablemente las ventas de coches nuevos con lo que los coches de más de 10 años han elevado su peso en el parque.
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| José Luis Gata, responsable de mercado posventa en Solera |
De manera similar, el crecimiento porcentual de los talleres medianos puede deberse justo al descenso de los talleres más viejos, que no han podido soportar la fuerte reducción de la movilidad durante los confinamientos, y también a que en una coyuntura tan adversa, la apertura de nuevos talleres se redujo al mínimo.Así que mucho ojito al sacar conclusiones de los datos porcentuales.
Volviendo al análisis realizado por Solera, esta compañía, utilizando datos de Equifax, señala que la morosidad se ha hecho más presente (13,9 por ciento) en los talleres con plantillas de 11 a 25 empleados con menos de una década de actividad. Estos talleres se distribuyen geográficamente de una manera bastante heterogénea, aunque en Madrid y Cataluña, donde hay más parque, se registran mayores niveles de morosidad, llegando a superarse el 9 por ciento.
Esos talleres medianos pueden ser los que más sufran con la actual crisis, especialmente aquellos negocios más jóvenes que aún están recuperando la inversión que realizaron para poder iniciar su actividad. De hecho, cuando la recuperación económica, los talleres medianos fueron los que más crecieron en número. Y, sin embargo, son ellos los que estarán más expuestos a los efectos de esta crisis, dice José Luis Gata, responsable de mercado posventa en Solera.
