🔸 La operación había desencadenado una reacción muy fuerte en medios políticos europeos, que se oponían a que sus industrias estratégicas de siempre comenzasen a pasar a manos chinas
La postura del gobierno italiano fue muy bien recibida por el gobierno francés y el ministro galo de Finanzas, Bruno Le Maire, manifestó que él y Giorgetti estaban trabajando juntos para mantener las fábricas europeas en manos europeas.
CNH entró en negociaciones con FAW respecto a una posible venta a esta de Iveco a comienzos del año pasado, conversaciones que se interrumpieron al desencadenarse la pandemia COVID-19. Posteriormente, el grupo chino reanudó las negociaciones, llegando a formular una oferta de unos 3.000 millones de euros por Iveco, oferta que el grupo estadounidense rechazó por considerarla muy baja. Las negociaciones vinieron a coincidir con una creciente oposición por parte de los políticos europeos a la entrada de capital chino en la industria europea de siempre.
Rotas las negociaciones con los chinos, todo apunta a que ahora, CNH, grupo controlado mayoritariamente por la familia Agnelli, retomará el proceso para escindir sus actividades en el campo de la maquinaria agrícola (New Holland) de las de vehículos industriales (Iveco) y sacar estas últimas a bolsa. En medios italianos, se considera que, de haberse producido la venta de uno de los fabricantes de camiones más emblemáticos de Europa, los Agnelli habrían tenido que hacer frente a duras críticas nacionales por vender uno de sus activos históricos a un comprador extranjero.