🔸 Las dos compañías han firmado un acuerdo de intenciones no vinculante para reducir costes y desarrollar tecnologías eléctricas y de conducción autónoma
La operación se enmarca en la firma de un acuerdo de intenciones no vinculante que estudiará la colaboración de ambas marcas para reducir costos y desarrollar tecnologías eléctricas y de conducción autónoma.
Desde el lado sueco se espera que la venta de UD Trucks, la antigua Nissan Diesel, les permita competir en mejores condiciones con Daimler Trucks en Alemania, Tata Motors en la India y Dongfeng Motor en China. Para Isuzu, un fabricante de camiones pequeños y medianos, una alianza con Volvo les ayudaría a desarrollar vehículos eléctricos.
Volvo es en estos momentos el quinto fabricante mundial de camiones, los cuasles comercializa con las marcas Volvo Trucks, Renault Trucks, Mack Trucks y, hasta ahora, UD Trucks.
Para Isuzu, la compra de UD Trucks supondrá un sensible incremento de producción que, con el tiempo, permitirá obtener importantes ahorros financieros a través de las economías de escala.
Desde Volvo se afirma que la transferencia del negocio de UD Trucks a Isuzu no tendrá un impacto demasiado notable en los resultados financieros del grupo sueco.