sábado, 14 de diciembre de 2019

CIRCULAR POR UNA CARRETERA EN MAL ESTADO AUMENTA LAS EMISIONES DE CO2 EN UN 6%

🔸 El 53 por ciento de la red viaria española presenta deterioros importantes en el pavimento, que, de no corregirse, convertirán en papel mojado los objetivos climáticos del Gobierno


La AEC estima que más de la mitad del firme de nuestra red viaria
presenta deterioros estructurales y superficiales importantes
MADRID ─ Repavimentar la mitad de la red de carreteras de nuestro país permitiría ahorrar 1.600.000 toneladas de CO2 al año, lo mismo que emite todo el tráfico de la ciudad de Madrid durante 8 meses. Esta es la principal conclusión del estudio “Análisis de la relación entre el estado de conservación del pavimento, el consumo de combustible y las emisiones de los vehículos”, realizado por la Asociación Española de la Carretera (AEC) con la colaboración de la Plataforma “Ponle Freno”, del grupo de comunicación Atresmedia, y Mercedes Benz. En dicho estudio se ha cuantificado, mediante pruebas reales, la diferencia de emisiones de un vehículo ligero y otro pesado circulando por una carretera en mal estado y, posteriormente, transitando por la misma vía tras ser repavimentada.

Los ensayos, llevados a cabo en un tramo de 46 kilómetros de longitud, confirman que, en el caso del vehículo ligero, las emisiones de CO2 disminuyen una media del 3,5 por ciento al circular por un asfalto bien conservado, llegando al 4 por ciento de reducción para el vehículo pesado. 

Si el pavimento presenta un deterioro estructural importante (grietas en las rodadas, 
baches, deformaciones, agrietamiento grueso, desintegraciones graves…), los vehículos ligeros llegan a emitir hasta un 9 por ciento más de CO2 (un 6 por ciento los pesados). Si el deterioro es superficial (agrietamiento fino, desintegraciones ligeras, descarnaduras, exudaciones, etc.), entonces las emisiones se incrementan un 5 por ciento y un 4 por ciento para cada uno de ambos tipos de vehículo. 

Si el pavimento presenta un deterioro estructural importante, los
vehículos pesados que ruedan sobre él pueden aumentar hasta un
6 por ciento sus emisiones de CO
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En su última auditoría del estado de conservación de las infraestructuras viarias del país (2018), la AEC estimaba que unos 53.500 kilómetros de carreteras en España (el 53 por ciento del total) presentan deterioros estructurales y superficiales importantes en el pavimento. Acometer la repavimentación de estas vías durante los próximos 10 años (lo que exigiría una inversión de 330 millones de euros anuales) reduciría las emisiones de CO2 un 6 por ciento, el equivalente a lo que absorberían 120 estadios de fútbol llenos de pinos durante una década.

A mayor deterioro, más consumo de combustible 

Una carretera mal conservada es, además, una carretera en la que se dispara el 
consumo de combustible.

El estudio de la AEC Análisis de la relación entre el estado de conservación del 
pavimento, el consumo de combustible y las emisiones de los vehículos ─cuyos 
resultados se han presentado coincidiendo con la celebración de la Cumbre del Clima de Madrid COP25─ cifra en cerca de 600 millones los litros de combustible que cada año se consumen de más como consecuencia del deterioro del asfalto. 

Y eso no es todo: circular por una carretera en mal estado también compromete la 
seguridad, desgasta los neumáticos (del entorno del 3 por ciento más en el caso de los vehículos ligeros, y el 2 por ciento en el de los pesados) y puede provocar otros daños en el vehículo.

Por todo ello, desde la AEC se hace un llamamiento a la necesidad de actuar con urgencia en la mejora de la red viaria. De lo contrario, los objetivos climáticos a los que se ha comprometido el Gobierno, que pasan por reducir las emisiones del transporte un 32 por ciento hasta 2030, serán papel mojado, aseguran desde la AEC.