🔸 Presentado en el Salón del Automóvil de Barcelona de 1971, pasaría al olvido muy poco tiempo después y ahora los hijos de su creador buscan fondos para reconstruirlo
MADRID ─ En un reciente artículo sobre la vigésima edición de RETROMÓVIL MADRID, el salón de vehículos clásicos que hoy ha celebrado su segunda jornada en el recinto ferial de IFEMA, hacíamos una brevísima referencia al Dodge Lanza, uno de los vehículos expuestos, el cual ha despertado cierto interés entre los seguidores de este blog, que desean saber más de tan curioso vehículo. Así que hemos recabado más datos del Dodge Lanza a EVENTOS MOTOR, los organizadores del certamen, que nos indican que el vehículo fue presentado en el salón de Barcelona de 1971 por Pablo Muñoz Lanza, habiendo sido desarrollado sobre la base de un Dodge, recibiendo, como cabría esperar, el nombre de Dodge Lanza. El señor Muñoz Lanza tenía un taller propio, donde se puso a trabajar en un coche que le permitiera competir, y ganar, la categoría nacional de deportivos –también conocida como categoría Sport–. Eso le obligaba a montar elementos de origen nacional, lo que dejaba poco donde elegir si quería algo realmente deportivo y rápido.
Resulta obvio decir que la España de los años 70 no era como la actual, y no por la evolución y los diferentes cambios sociales, que también, sino porque, tras la Guerra Civil, España había quedado en una situación de aislamiento casi total donde importar cualquier cosa era una odisea; todo se debía hacer aquí, así que el proyecto del Dodge Lanza fue muy artesanal. No obstante, en menos de un año ya se había terminado el coche. Un deportivo de imagen bastante llamativa –del que apenas hay imágenes–, con motor delantero central, reparto de pesos al 50 por ciento sobre cada eje y suspensión por ballestas. Las pruebas se hicieron por las calles de Madrid, con el propio Pablo al volante acompañado de su padre, unas pruebas que llevaron a cambios en el desarrollo para obtener más velocidad punta. Se estima que, ya en 1970, llegaron a conseguir pasar de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos y que alcanzaron 260 km/h de velocidad máxima.
A comienzos de 1971, los amigos de Pablo animaron a este a que presentara su Dodge Lanza en el Salón del Automóvil de Barcelona, a donde acudió subido al propio vehículo. Pero la trayectoria del Dodge Lanza no fue mucho mas allá. Pablo fue padre en 1973 –de un niño al que llamaron Pablo, como su padre y también como su abuelo, como entonces era tradicional en España– y el coche se dejó aparcado en el garaje familiar donde cayó en el más absoluto olvido.
Ahora, más de 40 años después, los hijos de Pablo Muñoz Lanza, Pablo y César, han iniciado una campaña de recaudación de fondos (crowdfunding) para poder encontrar algo de financiación con la que restaurar el coche. Hay que decir que el Dodge Lanza funciona mecánicamente y ya cuenta con algunos elementos que se han restaurado, pero quedan algunas de las partes más caras, como el retapizado y la pintura, aparte de algún componente imposible de encontrar y que requiera su reconstrucción.
Para cerrar este artículo, sólo desear mucha suerte a los hermanos Muñoz Lanza en su proyecto de revivir el sueño de su padre.
