🔸 Los infladores Takata han provocado al menos 400 heridos y 27 muertes en todo el mundo, 18 de las cuales en Estados Unidos
MADRID ─ La National High Traffic Safety Administration (NHTSA), la agencia federal estadounidense que entiende en materia de seguridad de los automóviles, ha ordenado a Ford que revise 3 millones de coches, de los que 2,7 millones se han vendido en Estados Unidos para reemplazar los infladores de sus airbags del lado del conductor. Esos infladores, fabricados por las japonesa Takata, han estallado en algunas ocasiones proyectando a modo de metralla trozos de metal que pueden originar graves daños al conductor y sus acompañantes. Los infladores Takata han provocado al menos 400 heridos y 27 muertes en todo el mundo, 18 de las cuales en Estados Unidos.
Los infladores de airbag Takata ya han provocado dos muertes en la
gama Ranger de camionetas Ford
Los vehículos ya habían sido llamados a revisión previamente por Ford para solucionar el problema en los infladores de los airbags del lado del acompañante. Pero, al saber que la NHTSA quería que se cambiaran también los infladores del lado del conductor, Ford presentó un informe en 2017 razonando que, según los datos aportados por ella, no era necesario sustituir los infladores del lado del conductor. Sin embargo, la NHTSA ha desestimado los argumentos de Ford y ha ordenado que se cambien también los infladores del lado del conductor.
Esta segunda llamada a revisión va a costar, según estimaciones del fabricante de automóviles, 610 millones de dólares (unos 500 millones de euros al cambio actual), que serán cargados en la contabilidad del cuarto trimestre del ejercicio 2021.
Los Ford Fusion fabricados de 2006 a 2012 también figuran en la
lista de vehículos que tendrán que ser revisados para cambiar los
infladores de airbags fabricados por el proveedor japonés Takata