♦ Los fabricantes de automóviles y la industria de componentes podrían estar buscando una alternativa a los planes PIVE
MADRID ─ En la segunda quincena de julio último, Luis de Guindos, el actual ministro de Economía, Industria y Competitividad, y los máximos representantes de la industria española del automóvil, a través de las asociaciones correspondientes a los fabricantes de vehículos (ANFAC) y a la industria de equipos y componentes para ellos (SERNAUTO), presentaron la primera Agenda Sectorial de la Industria de Automoción, apoyada por un estudio llevado a cabo por la consultora KPMG. ¿Qué es lo que realmente se pretende con esa agenda?.
Pues mucho nos tememos que lo que ocurre es que los fabricantes de automóviles y sus proveedores de componentes se han percatado ya de que lo de los planes PIVE se ha acabado y buscan como sea otras fuentes de ingresos.
Quienes siguen esta web-blog saben que nos oponemos claramente a ayudas como las que han venido en los últimos años a través de dichos planes y de otros anteriores (PREVER, 2000-E, etc., etc.) porque consideramos que éstos son discriminatorios para otros sectores de actividad que no se benefician de ellos y también porque terminan drogando al mercado y prueba de ello es que en estos últimos años hemos comprobado fehacientemente cómo nuestra industria del automóvil se había hecho adicta a dichos planes de ayuda, reclamándolos machaconamente siempre que tenían oportunidad pese a que ya nos habíamos recuperado del bache de ventas que se produjo a raíz de la crisis de 2007.
Y no sólo nuestra industria, sino el propio mercado, de manera que la demanda de vehículos quedaba dormida durante meses cuando se agotaban los fondos del último plan promulgado por el gobierno español, a la espera de otro nuevo.
Pues bien, parece que ya alguien de la propia industria se ha dado cuenta de que no nos faltaba razón y que cuando protestábamos alegando que aquellas ayudas alteraban el funcionamiento libre del mercado, teníamos razón... O también puede que, convencidos de que la continuidad de los planes de ayuda va a ser muy difícil, se trate ahora de tomar la iniciativa dando la imagen de que es la propia industria del automóvil la que ha llegado a la conclusión de que debe prescindirse de todas esas subvenciones.
Luca Parasaco, consejero delegado de FCA España, es de la opinión de que deben dejar de pedirse más planes PIVE porque han viciado el mercado español |
¿Cambio de táctica?
Hace un par de días, leíamos en el diario El Mundo unas declaraciones de Luca Parasaco, consejero delegado de Fiat Chrysler Automobile España desde hace dos años y cinco meses, en las que señalaba que la demanda de automóviles estaba bajando de nuevo y que ello era inexplicable porque la economía española va bien, como señalan sus indicadores principales. ¿Es que los compradores están esperando un nuevo PIVE?, se preguntaba Parasaco.
Hemos acostumbrado al sector a ese tipo de ayudas y eso no es bueno para las marcas ni para nuestra imagen. Por eso he pedido a Mario Armero, de ANFAC, que dejemos de hablar del PIVE, reconocía.
Aunque Parasaco pasaba después a reclamar que las ayudas al sector de automoción se concentren en los vehículos eléctricos y los de gas, cosa con la que de nuevo volvemos a no estar de acuerdo, hay que admitir que su acto de contrición es un buen paso, aunque ahora el sector tenga que someterse a un largo y doloroso programa de desintoxicación.
Por aquello de que piensa mal y acertarás, y apoyándonos en algún que otro detalle, como ese de que Parasaco pida que las ayudas se concentren en las formas alternativas de movilidad, se nos ocurre que la Agenda Sectorial de la Industria de Automoción podría consistir en una aproximación de esta industria al ministro De Guindos para que, entre otras cosas, éste apoye a la primera con nuevas formas de subvención entre las que, como apuntábamos al comienzo, podría figurar el apoyo financiero a la innovación.
¿Es prudente subvencionar la innovación?.
Si tradicionalmente ha sido la innovación uno de los factores que han contribuido a que ciertos fabricantes de automóviles hayan visto cómo vendían más que sus rivales y con ello podían seguir manteniéndose con vida en el transcurso de los años, qué sentido tiene favorecer financieramente la innovación.?. ¿No es el propio mercado el que, a través de las ventas, financia esa innovación?.
¡Si se empiezan a establecer criterios legales para subvencionar la innovación, ésta enfermará como Luca Parasaco dice que el mercado de vehículos lo hizo con los planes de ayudas a la compra!.
Lo que la industria de automoción tiene que hacer es funcionar en un marco de libre competencia. Y para ello, los primeros que tienen que corregir su postura son los responsables del gobierno que tienen que ver con esa industria, dejando de compadrear con ella.
Hace pocos días y a la vista de que las ventas de vehículos se estaban frenando en el mercado británico, los fabricantes de automóviles han tomado medidas. ¿Y qué han hecho?. ¿Ir a Teresa May a pedirle un plan de ayudas a la compra?. ¡No!; han reaccionado como manda la libre competencia: haciendo rebajas y promociones para atraer posibles clientes. Y si eso no es suficiente para que suban las ventas, tendrán que aumentar las rebajas y promociones u ofrecer vehículos más innovadores a un precio que sea más asequible.