viernes, 15 de septiembre de 2017

RECUERDOS DEL TRASTERO: "SINGING WHEELS" (RUEDAS CANTARINAS)

Uno de los grandes atractivos del documental Singing Wheels es sin
duda poder quedarse extasiado viendo rodar a modelos como éste,
algo que deleitará a los amantes de los camiones clásicos

Una mirada retrospectiva a través del cine de los vehículos, modos y maneras con los que se desenvolvía el transporte por carretera de hace más de 50 años


MADRID ─ Hacía muy poco que había terminado la II Guerra Mundial, apenas un año pues corría 1946. Sólo un país, Estados Unidos, de cuantos habían participado en el conflicto, no tuvo que acometer una reconstrucción, en sentido estricto, de sus ciudades, exceptuando, claro está, algunas de las de las Islas Hawai, pues fue en uno de sus puertos Pearl Harbour el que el 7 de diciembre de 1941 fue atacado y destruido por sorpresa por el ejército japonés. Sin embargo, en el continente, las infraestructuras no habían experimentado daños, pero sí tenía que recuperar el pulso la actividad industrial y la economía propia de los tiempos de paz. Y fue entonces cuando se rodó una película, hoy casi olvidada pero que es un canto a la actividad del transporte por carretera que no ha perdido ni un ápice de vigencia en lo que a resaltar la infinita importancia que camiones y autobuses tienen en el quehacer diario de nuestras vidas. En realidad, se trata de un cortometraje ─dura poco más de 23 minutos─ que el lector interesado podrá ver al final de este comentario.

El documental ─no es otra cosa─ Singing wheels (Ruedas cantarinas) se empezó a proyectar en las pantallas estadounidenses, como ya hemos dicho, en 1946. Fue financiado por el Comité de Camiones de la Asociación de Fabricantes de Camiones (Motor Truck Committee of Automobile Manufacturers Association). AMA era una asociación que nació en 1911 con ánimo de defender los intereses de los fabricantes estadounidenses de automóviles, algo parecido a lo que fue en origen nuestra ANFAC.

Con el paso del tiempo, AMA fue cambiando de nombre, según iba adaptándose a la evolución de la industria del motor, abriéndose a fabricantes no estadounidenses pero presentes en el mercado norteamericano de automóviles a los que luego terminaría echando para quedarse en la práctica con General Motors (GM) , Ford y Chrysler. Pero cuando el grupo alemán Daimler se hizo con Chrysler para crear DaimlerChrysler, la nueva empresa no podía considerarse un constructor estadounidense, con lo cual, a AMA sólo le quedaban dos fabricantes: GM y Ford, con lo que la asociación terminó disolviéndose en 1999. El relevo de AMA lo tomaría la Alianza de Fabricantes de Automóviles (Alliance of Automobile Manufacturers) abierta desde sus inicios a los fabricantes no estadounidenses.

Hay que subrayar que Singing Wheels representa claramente un homenaje que AMA rendía a sus clientes: los transportistas. ¿Conciben los lectores de MOTORSCOPIO que alguna de las principales asociaciones españolas de fabricantes de vehículos o de concesionarios o vendedores de automóviles hicieran algo similar para homenajear a sus clientes?... ¡Nosotros tampoco!.

No faltarán quienes piensen que Singing Wheels es una de las muchas películas de propaganda capitalista e incluso, al ver algunas escenas de soldados que se incluyen casi al final, un instrumento militarista. No vamos a entrar a discutirlo, pues lo que pretendemos es únicamente que el amante de la historia del transporte por carretera pueda deleitarse viendo en movimiento muchos vehículos que a estas alturas sólo pueden admirarse en fotografías. Sin perder de vista el mensaje fundamental que dimana del film, que no es otro que lo vital que el transporte por carretera es para que funcione la logística de nuestras vidas. Eso tan conocido de que si usted encontró en la tienda lo que necesitaba es porque un camión lo había llevado hasta allí.

¡Que lo disfruten!