► Su ministra de Medio Ambiente, Ségolène Royal, afirma que aún podrían prohibir la venta de determinados modelos de Renault y Volkswagen
El Renault Captur, fabricado en España, es uno de los modelos del fabricante francés investigados por el gobierno |
Aunque Royal afirmó que su Ministerio espera para el mes que viene los resultados de la investigación oficial sobre el tema que se abrió a algunos motores Renault, se hace difícil creer que el gobierno francés vaya a tomar al final acción alguna contra este fabricante de vehículos de cuyo capital es partícipe, por mucho que diga Royal.
Renault y VW tienen abiertas investigaciones oficiales en Francia por posible fraude de las leyes que regulan las emisiones contaminantes de los motores de automóviles. Otros fabricantes, como Fiat y Opel han sido acusados también por algunos grupos ecologistas de usar esos dispositivos.
A diferencia de Estados Unidos, donde estas cosas las tienen mucho más claras ─y si no, que se lo pregunten al grupo VW, que ya acumula una cuantiosa cifra de dinero en indemnizaciones y sanciones en ese país por este asunto─ en Europa no está nada claro si el uso de esos dispositivos que anulan la limitación de emisiones contaminantes en determinadas circunstancia es legal o no, ya que, siempre que actúen para evitar daños al motor, estarían permitidos de acuerdo con la legislación comunitaria.