miércoles, 27 de octubre de 2021

NAVISTAR MULTADA CON 45 MILLONES DE EUROS POR HABER COMERCIALIZADO MOTORES QUE NO CUMPLIAN LA NORMATIVA SOBRE EMISIONES DE ÓXIDOS DE NITRÓGENO (NOx)

🔸 El fabricante estadounidense de motores, camiones y autobuses también tendrá que comprar y destruir suficiente cantidad de esos motores para evitar unas emisiones de al menos 10.000 toneladas de NOx

MADRID ─ Navistar, el fabricante estadounidense de motores, camiones y autobuses que fue adquirido en julio último por la alemana Volkswagen para integrarlo en el grupo Traton junto con MAN, Scania y Volkswagen Camiones y Omnibuses, ha conseguido llegar finalmente a un acuerdo con el Departamento de Justicia de su país con el que cierra un pleito que llevaba años coleando.

El problema surgió cuando Navistar empezó a comercializar en 2010 unos motores Diesel que teóricamente cumplían los límites máximos de emisión establecidos en la normativa EPA 2010, equivalente a la europea Euro 6, en cuanto a los óxidos de nitrógeno (NOx). Resultó que aquellos motores, que no usaban AdBlue y evitaban la emisión excesiva de dichos óxidos haciendo uso tan solo de la recírculación de los gases del escape y no del AdBlue y la tecnología SCR, superaban ampliamente los límites de emisión de NOx, lo que llevó a Navistar ante los tribunales de Estados Unidos en 2015 denunciada por la EPA (Agencia de Protección del Ambiente) por violar la Ley del Aire Limpio.

Tras muchos años de pleito, finalmente Navistar ha aceptado un acuerdo que cerrará definitivamente el caso y por el que se obliga a pagar una multa de 52 millones de dólares (unos 45 millones de euros al cambio actual) y también a comprar y destruir una cantidad suficiente de aquellos 7.749 motores conflictivos para sumar un potencial de emisión de al menos 10.000 toneladas de NOx, además de perder los créditos de emisión de NOx que Navistar tenía hasta ahora.

Según, Larry Starfield, administrador adjunto interino de la EPA, Navistar deberá presentar la documentación acreditativa de que los motores que destruye corresponden a los del año modelo de 2010 y tendrá que destruir los motores en cuestión teniendo en cuenta la diversidad geográfica y los beneficios que la operación puede reportar a las comunidades que están especialmente sobrecargadas por la contaminación del aire.