miércoles, 14 de octubre de 2020

RECUERDOS DEL TRASTERO: LOS PLANES QUE SEDDON ATKINSON TENÍA PARA EL PEGASO TRONER EN GRAN BRETAÑA

🔸 La compañía británica jamás se planteó seriamente la comercialización del modelo español y su propietaria, la española ENASA, siempre se mantuvo ajena al control de los planes industriales y comerciales de la primera

Seddon Atkinson nunca se planteó una comercialización seria
del Pegaso Troner en el mercado británico

MADRID ─ En una de esas clásicas búsquedas de documentos antiguos en la que uno termina hallando todo menos lo que busca, me encontré traspapelado un ejemplar fechado el 25 de agosto de 1988 de la revista británica Commercial Motor, seguramente la que más influyó en mi formación como periodista del vehículo industrial a comienzos de los años 70. En ese ejemplar, ─¡oh casualidad!─ se publicaba un extenso artículo sobre el lanzamiento en Gran Bretaña del camión Strato de Seddon Atkinson que, como muchos de los lectores que siguen este blog saben, compartía cabina con el Pegaso Troner que la compañía española ENASA había presentado un año antes. Sí, la cabina hecha por CabTec, la sociedad conjunta que ENASA había creado en 1984 junto con DAF, el fabricante holandés que usó esa cabina en su gama 95 de camiones. Pero, además, en las primeras páginas de ese ejemplar de Commercial Motor se incluía una breve noticia en la que se hablaba de los proyectos que Seddon Atkinson tenía respecto a la comercialización del Pegaso Troner en el mercado británico, que es sobre lo que voy a centrarme en este comentario de hoy.

Antes de continuar, me gustaría insistir que aunque en España se vendió como operación exitosa la compra de Seddon Atkinson por ENASA, que es la idea que, desgraciadamente, ha perdurado en el tiempo, la realidad es que tal compra no existió, sino que fue una compensación envenenada que por el precio de una peseta o una libra esterlina ─da igual la moneda─ hizo International Harvester (IH) a ENASA por el incumplimiento de los acuerdos industriales que la compañía americana tenía firmados con la española, acuerdos que incluían la construcción de una fábrica de motores para camión en Cádiz.

Y digo que fue una compensación envenenada porque lo primero que tuvo que hacer ENASA fue inyectar dos millones de libras esterlinas de las de entonces para que los acreedores de la entonces arruinada Seddon Atkinson accedieran a desbloquear las cuentas bancarias del fabricante británico y que éste pudiera comenzar a trabajar.

Volviendo a los planes de Seddon Atkinson respecto a la comercialización del Pegaso Troner en el mercado británico que se exponían en aquel ejemplar de Commercial Motor, se anunciaba que los camiones españoles se comenzarían a importar a mediados del año 1989, es decir, casi un año después de lanzarse el Strato, un vehículo que había venido a sustituir a la vieja serie 400 de Seddon Atkinson que tenía ya 14 años de antigüedad.

Unos objetivos de ventas muy limitados

Ya desde el primer momento, Seddon Atkinson dejaba bien claro que sólo veía un volumen de ventas muy pequeño para los Pegaso Troner en el mercado británico, que seguramente se reduciría a algunos transportistas que cubrían rutas en la parte continental de Europa y que seguramente preferirían el Troner al Strato ya que la red de servicio técnico posventa de Pegaso en la Europa continental era mejor que la que podía ofrecer Seddon Atkinson para sus Strato. 

Se decía también entonces que el Pegaso Troner probablemente se vendería en Gran Bretaña con el motor de 360 caballos y que el modelo español no sería vendido por toda la red de concesionarios de Seddon Atkinson sino sólo por algunos de ellos.

Los Strato de Seddon Atkinson compartían cabina con los Pegaso
Troner y con los DAF 95 e iban impulsados por motores Cummins

Los Pegaso Troner iban a llegar al mercado británico totalmente montados y aunque el hecho de compartir la cabina habría facilitado el intercambio de motores, en Seddon-Atkinson no tenían la menor intención de ofrecer su flamante Strato con el motor Pegaso del Troner.

Tampoco se tenía intención alguna de ofrecer los Troner con alguna de las cinco opciones de motorización Cummins que se ofrecían para el Strato: dos con 10 litros de cilindrada con 300 y 325 caballos de potencia y tres con 14 litros de cilindrada con 320, 350 and 400 caballos, siendo este último el que más podría haber incentivado las ventas del Troner... pero a costa de canibalizar las del Strato.

Pensamos que estas líneas dejan muy claro que ni Seddon-Atkinson tuvo nunca el menor interés en promocionar la venta del Pegaso Troner en el mercado británico, ni ENASA se planteó en momento alguno tomar las riendas de la política comercial y de producto de Seddon-Atkinson, una compañía que había llegado a manos españolas como regalo envenenado de la estadounidense IH y con la que, precisamente por eso, ENASA no sabía qué hacer.