martes, 13 de febrero de 2018

LOS CONDUCTORES EUROPEOS TODAVÍA QUIEREN MOTORES DE GASOLINA O GASÓLEO

🔴 Casi un 60 por ciento de los conductores europeos ven un futuro positivo para ellos, según una encuesta publicada por Mazda


Una encuesta encargada por Mazda a Ipsos MORI pone de manifiesto
que los conductores europeos creen que los motores de gasolina o
Diesel tienen aún un amplio recorrido de evolución y mejora

MADRID ─ Ayer reseñábamos en esta web-blog que aunque se nos anuncia para 2019 una versión eléctrica de la tercera generación de la gama de furgonetas Sprinter que se presentará en junio próximo, de momento las motorizaciones con que van a contar estos vehículos son Diesel, el repudiado y perseguido Diesel. Hoy leemos un titular en una publicación económica en que un directivo de una compañía relacionada con el sector asegura que el precio de los coches eléctricos igualará al de los de motor de explosión en 2020, un poco como vaticinando que los motores de combustión interna tienen los días contados. ¿A quién hacemos caso?. ¿Tienen o no futuro los motores de combustibles fósiles convencionales?.

Pues para responder esa pregunta pueden ser de gran ayuda los resultados de una encuesta encargada por Mazda, el fabricante japonés de automóviles, a la compañía Ipsos MORI, especializado en estudios y sondeos de opinión, una encuesta encuadrada en el proyecto de investigación Mazda Driver. Y los resultados más llamativos del estudio muestran que los consumidores no necesariamente comparten la opinión de muchas organizaciones de que el motor de combustión interna no tiene ningún papel en el futuro de los automóviles.

Ipsos MORI encuestó a 11.008 personas en los once principales mercados europeos y un promedio del 58 por ciento de las mismas que quedan muchas innovaciones y mejoras por venir en los motores de gasolina y Diesel; la cifra llega hasta el 65 por ciento en Polonia y queda por encima del 60 por ciento en Alemania, España y Suecia... ¡Suecia!, un país con frecuencia tomado como ejemplo de sensibilidad a las cuestiones medioambientales.

La encuesta también da fe de que aunque los vehículos eléctricos irán consiguiendo mayor presencia en el mercado, el 31 por ciento de los conductores esperan que los coches Diesel continúen existiendo, porcentaje que llega al 58 por ciento en Polonia.

Asimismo, el 33 por ciento de todos los conductores encuestados afirmaron que si los costos de funcionamiento fueran iguales que los de un automóvil eléctrico, preferirían un automóvil de gasolina o Diesel; una opinión que en Italia compartía hasta el 54 por ciento.

Sólo un 33 por ciento a favor de los coches autónomos

Otro tema tratado en la encuesta de Ipsos MORI ha sido el de los coches autopilotados, otra innovación que por doquier se insiste en que cada vez está más próxima pero que sin embargo no parece muy deseada por los automovilistas. En efecto, sólo el 33 por ciento de los conductores dan la bienvenida al advenimiento de los coches autopilotados, porcentaje que desciende al 25 por ciento en Francia y Países Bajos. Y además, desde Ipsos MORI se señala que, por sorprendente que parezca, no hay evidencias de un mayor apoyo para los coches autónomos en estratos de edad más jóvenes en toda Europa.

Conviene dejar claro en este punto que Mazda investiga desde hace tiempo en el frente de las funciones avanzadas de seguridad y los vehículos autopilotados, contando con un prototipo, el Mazda Co-Pilot Concept, al que se van incorporando todos los avances logrados en dichos frentes y que la compañía japonesa quiere que cuaje en un vehículo autopilotado que se ponga a la venta en 2025.

Mazda cree que conducir es una habilidad que la gente quiere conservar; una actividad divertida y funcional, que a muchos gustaría transmitir a las generaciones futuras. Estos sentimientos son ciertamente evidentes en los resultados de la investigación que estamos comentando, los cuales mostraron una conexión emocional significativa entre el automóvil y el conductor. Por ejemplo, un promedio del 69 por ciento de los conductores esperan que las futuras generaciones continúen teniendo la opción de conducir automóviles", un porcentaje que sube hasta el 74 por ciento en Polonia y hasta el 70 por ciento o más en Reino Unido, Alemania, Francia y Suecia.