jueves, 16 de marzo de 2017

NAVISTAR AUMENTA SUS PÉRDIDAS MÁS DE LO ESPERADO

Jarro de agua fría para unos inversores aún eufóricos por la entrada en el capital de Navistar del grupo alemán Volkswagen y el comienzo del suministro de motores MAN al constructor estadounidense



La recuperación de la entrada de pedidos de camiones pesados
en Estados Unidos aún no ha reflejado su efecto positivo en las
cuentas del constructor de vehículos industriales al final del
primer trimestre de su ejercicio fiscal 2016-2017
MADRID ─ La euforia que rodeaba la presentación de sus resultados financieros en el primer trimestre de su presente ejercicio fiscal, que concluyó el 31 de enero último, tras completarse pocos días antes la entrada del grupo Volkswagen en el capital de Navistar, el constructor estadounidense de vehículos industriales, que había adquirido una participación del 16,6 por ciento en éste último e iniciado el suministro de motores MAN para sus camiones International, ha sido disipada repentinamente por el anuncio de la directiva de Navistar de que en el referido trimestre habían registrado 62 millones de dólares de pérdidas (unos 58 millones de euros al cambio actual).

No es que en medios financieros se pensase que Navistar iba a anunciar el ansiado retorno a los beneficios, sino que aunque se presagiaban pérdidas, no se esperaba que llegaran a ser de esa cuantía. De hecho, dado que en los dos primeros meses de este año la demanda de camiones pesados (por encima de 14,5 toneladas de peso total con carga en Estados Unidos) había registrado una cierta recuperación ─en términos de entrada de pedidos─ con respecto a los mismos meses de 2016, se creía que ello vendría a sanear un poco las finanzas de Navistar.

La verdad es que, en términos de ventas, que a la postre es lo que pesa de manera más inmediata en la contabilidad, en febrero último se habían reducido a 11.200 unidades en el segmento mencionado, lo que representa una caída del 29,4 por ciento con relación al mismo mes de 2016. En el conjunto de los dos primeros meses del presente año, se han vendido sólo 22.144 vehículos, un 30,4 por ciento menos que en el mismo período del año pasado. Y lo peor de todo es que, con febrero, ya son once meses seguidos de contracción de la demanda.

Fallaron las previsiones

Para desgracia de Navistar, la reciente recuperación de la entrada de pedidos aún no se ha hecho notar en sus finanzas y los ingresos del constructor de vehículos industriales han sido de sólo 1.700 millones de dólares en el primer trimestre de su ejercicio fiscal 2016-2017, por debajo de los 1.800 millones registrados en el mismo período del ejercicio previo.

Lo malo es que si bien un grupo de analistas consultado por Thomson Reuters había acertado al predecir esos ingresos, no había ocurrido así con los gastos, pues las pérdidas finales resultaron ser un 68,9 por ciento superiores a las estimadas por esos analistas. Otro grupo de analistas reunido por Zacks se habían acercado algo más a la realidad, previendo unas pérdidas algo mayores (1.750 millones de dólares) pero aún así, esa realidad fue todavía un 49 por ciento más elevada que la previsión de estos últimos.

Se trata del octavo trimestre consecutivo que Navistar cierra en números rojos, una circunstancia que algunos medios informativos consideran que no alterará los planes del grupo Volkswagen para una toma de control completa de Navistar y su red de distribución, algo que nosotros no vemos ni mucho menos sencillo.