¿POR QUÉ HUBO CAMIONES QUE LLEVABAN LA MARCA MAN-BÜSSING EN LA REJILLA DE SU RADIADOR EN LOS AÑOS 70?

🔸 Eran unos camiones que iban propulsados por motores horizontales bajo el chasis, por detrás del eje delantero, una solución técnica que había sido popularizada por Büssing algunos años antes de que este fabricante fuese adquirido por MAN

La cabina de los MAN-Büssing 16.320 llevaba asientos con
amortiguación hidráulica y elevalunas eléctricos sobre demanda

MADRID ─ Al navegar por Internet, a los buenos aficionados a los camiones clásicos les suele llamar mucho la atención que en algunas fotografías de camiones MAN se vea que en el morro de los mismos aparezca la palabra MAN y, bajo ella, en letras más pequeñas, también figure la palabra Büssing, mientras que en otras fotos o solo sale MAN o solo sale Büssing. Todos ellos saben que Büssing era un fabricante alemán de camiones y autobuses creado en 1903, y hoy desaparecido, que tenía su sede en la ciudad de Brunswick. Pues bien, en la segunda mitad de los años 60, Büssing empezó a padecer graves problemas financieros que conducirían a que esta compañía terminara siendo adquirida por MAN en 1971.

Para entonces, Büssing, que siempre se había distinguido por sus atrevidas soluciones técnicas, ya se había hecho famosa por sus motores horizontales bajo el chasis, detrás del eje delantero, una solución muy apreciada por los conductores, especialmente en los trayectos de larga distancia, ya que permitía que las cabinas dispusieran de mucho espacio interior y fuesen muy cómodas. Además, el situar el motor horizontalmente bajo el chasis y entre los ejes ofrecía la ventaja adicional de que el acceso al mismo era particularmente fácil y, por lo tanto, muy cómodo también de mantener.

Büssing también fabricó el Commodore S 16-210, un vehículo con
motor horizontal por debajo de la cabina y por delante del eje anterior,
que no fue muy afortunado y padeció de muchos problemas técnicos

Antes de proseguir, parece oportuno mencionar aquí que, a mediados de los años 60, Büssing fabricó también un número limitado de unidades de sus vehículos con motor horizontal en las que éste, el motor, en lugar de ir bajo el chasis y por detrás del eje delantero, iba por delante del eje delantero y debajo de la cabina. Nos referimos al modelo Commodore S 16-210, del que junto a estas líneas aparece la foto de una de aquellas unidades. Esta variante parece que no tuvo demasiado éxito y quienes la conocieron recuerdan que daba muchos problemas mecánicos.

Pues bien, nada más hacerse con Büssing, MAN introdujo en su oferta de producto una serie de camiones que usaban el apreciado sistema de motor bajo el chasis, a los que distinguió poniendo en la rejilla del radiador las palabras MAN y Bussing, para sacar partido de la fama que tenía el motor bajo el chasis de la firma de Brunswick. Y por debajo de esas dos palabras, a modo de peana, el característico león de Brunswick, que era el emblema de Büssing desde los primeros años 30 y que terminaría siendo adoptado para siempre ─o, al menos, hasta la fecha─ por MAN.

Büssing produjo el camión BS 16 L de 16 toneladas con motor bajo
el chasis entre 1967 y 1971

Estos camiones se construyeron entre 1973 y 1979 en la propia fábrica que Büssing tenía en la ciudad de Salzgitter de 1973 a 1979, siendo los modelos más vendidos de aquella serie de camiones MAN con soluciones Büssing y un motor turboalimentado de 12,3 litros de cilindrada que rendía 320 caballos de potencia los 16.320 U y 16.320 UL, cuyo éxito se debió también a que MAN aprovechó para aligerarlos y rebajar su tara en comparación con sus precursores Büssing, logrando así más capacidad de carga útil.

En una prueba publicada en los años 70 por la revista alemana Lastauto-Omnibus, un MAN-Büssing 16.320 U a plena carga y a una velocidad media de 58,6 kilómetros por hora,  consumió 45,3 litros de gasóleo cada 100 kilómetros, una cifra que ahora puede espantar pero que en 1973 era un buen consumo.