🔸 La pandemia, la escasez de microchips y las vacaciones de verano hunden la producción británica de coches a niveles de 1956 mientras la matriculación en los principales mercados europeos baja a niveles de 2012
FUENTE: SMMT |
Lógicamente, la situación de las ventas se plasma en la actividad productiva, donde el caso más dramático se ha dado en el Reino Unido, donde la producción de coches cayó un 37,6 por ciento en julio de 2021, registrando, con sólo 53.438 unidades fabricadas, la primera caída desde febrero, según las últimas cifras publicadas por la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Motores (SMMT por sus iniciales en inglés). Esa cifra representa el peor registro para un mes de julio desde 1956 y los motivos de semejante descenso son la escasez global de semiconductores (microchips), la falta de mano de obra a consecuencia del COVID19 y las vacaciones estivales que se tomaron en ese mes algunas de las fábricas británicas de automóviles.
En julio, la producción para el mercado del Reino Unido se redujo un 38,7 por ciento a 8.233 unidades, mientras que la fabricación para la exportación también cayó un 37,4 por ciento con 45.205 coches enviados al extranjero. Las exportaciones representaron más de ocho de cada 10 (84,6 por ciento) vehículos construidos en el mes.
Jato Dynamics señala que, en contraste con la tendencia general, los consumidores europeos han aumentado sus compras de vehículos ecológicos, habiéndose matriculado 160.646 vehículos eléctricos puros (de batería) e híbridos enchufables (plug in), lo que significa una de cada seis matriculaciones, sin que esa subida haya venido a compensar la caída de las ventas de vehículos propulsados por motores Diesel, cuya cuota de mercado se redujo en 8 puntos porcentuales en los últimos 12 meses.
Esto significa que la propulsión por gasolina ha ganado cuota de mercado en el año móvil a julio de 2021.