jueves, 3 de febrero de 2022

BEERS Y BE-GE KAROSSERIFABRIK, DOS EMPRESAS CLAVE EN LA EXPANSIÓN DE SCANIA EN EUROPA A MEDIADOS DEL SIGLO XX

🔸 Impacto de la legislación sueca de 1961 relativa a la seguridad de las cabinas de los camiones en caso de accidente sobre la presencia de Scania-Vabis en Holanda

La compañía sueca Beers desembarcó en el mercado holandés de
camiones en 1946 exponiendo en una feria un Scania-Vabis L22
como el que muestra la fotografía
MADRID ─ A mediados de enero de 2022 publiqué en este blog un artículo dedicado a las múltiples cabinas avanzadas que a mediados del siglo pasado se construyeron en Holanda para Scania-Vabis, artículo que fue muy bien acogido por los seguidores de MOTORSCOPIO, mereciendo incluso que Juan Carlos Pello, un gran especialista en camiones clásicos, me hiciera algunos comentarios que me animaron a recopilar más información sobre la materia con ánimo de escribir un nuevo artículo sobre el tema y precisar algunos puntos expuestos quizá demasiado ambiguamente en el primero. Y comenzaré por distinguir dos aspectos que aunque son complementarios tiene cada uno su propia entidad. Me refiero a la actividad exportadora de Scania por un lado, y a la actividad carrocera holandesa por otro.

El logo de Beers desapareció en 2004 cuando Scania absorbió la
compañía, convirtiéndola en Scania Beers BV
En la historia de Scania hay muchas etapas que resultaron cruciales para que este fabricante de vehículos industriales se convirtiera en lo que es en la actualidad y sin duda una de esas etapas es la de las décadas de 1950 y 1960 durante las cuales el constructor sueco da un enorme impulso a su actividad exportadora, algo que contribuyó a desencadenar unos cuantos años antes una compañía sueca denominada Beers, cuyo fundador, Adrian Beers, se había hecho en 1915 con la importación de los camiones alemanes Büssing para el mercado sueco. En 1923, Beers amplió su actividad con la importación para Suecia también de los camiones franceses Chenard Walker y, 
en 1946 presentaba en una feria holandesa un chasis de camión y autobús de Scania-Vabis, concretamente un L22 que sería adquirido por la compañía holandesa Winder Limmen, tras lo cual Beers se convertiría en la importadora oficial para Holanda de los vehículos del fabricante sueco.

Llegada a Holanda en 1954 del Scania-Vabis número 1.000
importado por Beers
A comienzos de los años 50, Beers, que desde los años 30 ya tenía entre sus actividades la importación de chasis de la estadounidense Diamond T, empezó a impulsar las exportaciones de Scania de manera que si antes de 1950 esa actividad sólo afectaba al 10 por ciento de la producción de este fabricante, en 1954 Beers entregaba en Holanda el chasis número 1.000 y, a finales de esa década, ya representaba sin embargo un 50 por ciento y convertía a Beers en un socio clave para Scania, importando el chasis número 10.000 para el mercado holandés a comienzos de los años 70.

Aquella expansión fue posible en buena medida gracias a que Beers había desarrollado su actividad importadora de los camiones Scania para Holanda creando su propia red de distribución de los camiones suecos y también de asistencia técnica para los mismos en este país, lo que animaría al constructor sueco a entrar en el capital de Beers. La filosofía con que Beers desarrolló su actividad importadora de los productos Scania en Holanda tuvo tal éxito que sería después adoptada por el fabricante sueco para acometer su expansión en otros mercados.

Beers no solo fabricaba cabinas para Scania sino también para Volvo.
como muestra la fotografía
Beers adquirió tal importancia que en 1964 comenzó a cotizar en la bolsa de Amsterdam. Para entonces, Scania ya tenía una presencia del 49,9 por ciento en el capital de Beers. A finales de los años 90, Beers contaba con 35 sucursales en Holanda y 8 en Alemania. Pero en 2001 Scania decide hacerse con la totalidad del capital de Beers, forzando a ésta a vender sus sucursales en Alemania a Scania Deutschland, la filial alemana de la propia Scania. A finales de 2004, Beers pasó a denominarse Scania Beers BV.

Be-Ge

El otro aspecto que contribuyó a la expansión de Scania en el mercado holandés y que conduciría a la apertura por parte de este fabricante de su propia fábrica en la ciudad holandesa de Zwolle en 1964 ─una planta que quien escribe estas líneas tuvo oportunidad de visitar hacia finales de los 80 o primeros 90─ fue sin duda la actividad de los carroceros holandeses en la transformación de los camiones con morro que Scania construía en Suecia para dotarles de una cabina avanzada, frente este que contó con un protagonista destacado: la empresa Be-Ge Karosserifabrik, una compañía sueca con sede en la ciudad de Oskarshamn, en la costa sureste de Suecia, que venía fabricando cabinas de camiones desde 1946 y que suministraba cabinas no solo a Scania-Vabis, sino también a Volvo, su competidor más directo.

Vehículo a mitad de camino entre un camión y un autobús que Be-Ge
carrozó hacia 1956 sobre un chasis B5153 de Scania-Vabis
Ante el crecimiento de la actividad de construcción de cabinas avanzadas para los camiones Scania-Vabis en el mercado holandés, Bror Göthe Persson (las iniciales de sus dos nombres de pila, Bror y Göthe, son precisamente las que dan lugar a la denominación Be-Ge), propietario de Be-Ge Karosserifabrik, terminaría por abrir también una planta de carrozado en la ciudad holandesa de Meppel, a unos 25 kilómetros de Zwolle.

Pero en 1961 sucedió un hecho que vino a alterar profundamente el marco industrial en que hasta entonces se había movido la actividad de Scania-Vabis en Europa. Nos referimos a la promulgación por parte del gobierno sueco de una ley según la cual era obligatorio que las cabinas de los camiones soportaran fuertes impactos tanto en el pilar A de las cabinas, como en la parte posterior de estas y aguantaran una carga pesada en el techo. Esto condujo inmediatamente a que todos los fabricantes suecos de camiones tuvieran que construir en acero las cabinas de sus camiones, lo que proporcionaba a todos ellos una ventaja competitiva en los mercados de exportación, ya que la Unión Europea no estableció una normativa similar hasta finales de la década de 1990.

Scania-Vabis LV 71 de 1958 con cabina avanzada fabricada por
Be-Ge Karosserifabrik
Otro de los efectos de esta normativa introducida por el gobierno sueco para las cabinas de los camiones construidos por sus fabricantes fue que en 1966 Scania-Vabis decidiera adquirir el control de Be-Ge Karosserifabrik, comprando este carrocero que, aparte de tener un origen sueco, tenía una actividad mucho más importante que la de otros carroceros holandeses como Roset, van Eyck, de Graaff y Werkspoor, que también construían cabinas avanzadas para los camiones Scania-Vabis.